Según Working Tools, consultora de capacitación laboral con sede en Pilar, lo primero que se debe tener en cuenta es que “un CV exitoso es aquel que es breve, conciso, de fácil lectura, atractivo a la vista y que está acompañado por una carta de presentación. Su extensión no debería superar la carilla y media o dos carillas. En el CV debe expresarse claramente cuál es el objetivo que nos proponemos alcanzar”, explica Lía Alcoba, directora de Working Tools.
En cuanto a los antecedentes laborales a incluir en el CV, en Working Tools recomiendan ordenarlos desde el más reciente hasta el más antiguo, destacando en cada uno de los trabajos los logros obtenidos en diferentes áreas en que nos hemos postulado.
Es importante tener en cuenta que no es necesario enumerar todas y cada una de las experiencias laborales, si se considera que no aportarán información de interés para la búsqueda a la cual nos estamos postulando.
El CV no siempre es el mismo ya que puede modificarse, en función de una u otra búsqueda. Un punto a tener en cuenta es el lenguaje que utilizamos. Tenemos que ser nosotros mismos. Tenga presente que el CV es un relato de su trayectoria laboral e historia personal.
Por último, a la hora de confeccionar el CV, es bueno realizarnos las siguientes preguntas: ¿la carta de presentación cumple con el objetivo que es el de incentivar la lectura del CV?, ¿el CV es lo suficientemente atractivo y breve, conciso y representativo de mis antecedentes laborales?, ¿concuerda con los requisitos de la búsqueda a la cual me estoy presentando?, ¿es claro con respecto a los objetivos de carrera?, ¿menciona ese valor agregado que puedo aportar a la empresa u organización a la cual me postulo?.
Se debe transmitir quién es usted y qué es lo que puede aportar para la empresa que ofrece la búsqueda. Se trata de una foto suya, y por lo tanto, usted elige qué imagen dar.