El Colegio de Registradores y la Asociación Profesional de Administradores Concursales (ASPAC) han creado un grupo de trabajo interinstitucional cuyo fin principal es mejorar la tramitación de los concursos, evitar el colapso judicial y facilitar el desempeño diario de registradores mercantiles y profesionales de la insolvencia.
Ambas instituciones han sumado fuerzas ante el previsible aumento de concursos de acreedores que se espera en los próximos meses tras la crisis del COVID-19. El grupo de trabajo estará formado por tres expertos miembros de la Asociación y otros tres expertos miembros del Colegio de Registradores. Todos están trabajando ya en detectar los problemas existentes y analizar las posibles vías de solución.
María Emilia Adán, decana del Colegio de Registradores, ha destacado: “la importancia social de esta iniciativa que pone los registros de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles al servicio de las empresas, de los empresarios y de sus empleados en situación de concurso, apoyando las soluciones tendentes a su viabilidad, todo ello, en un momento en la que la cifra de concursos puede desgraciadamente crecer, en los próximos meses, en grandes proporciones, tras la crisis provocada por el Covid19”
Por su parte, Diego Comendador, presidente de ASPAC, señala: “estamos muy contentos por trabajar de la mano con el Colegio de Registradores. Ambas organizaciones llevamos monitorizando la situación legislativa y la realidad económica desde hace tiempo y tenemos mucho que aportar para intentar que un número mayor de empresas puedan recuperarse de esta crisis económica producida por el Covid-19”.