Fundación Diquecito, una institución sin fines de lucro con sede en La Calera, ha tenido la iniciativa de llevar a cabo una de las más importantes acciones para recuperar y reforestar las zonas naturales afectadas.
El primer paso será la plantación y el cuidado de las especies autóctonas en el sector cercano a La Calera y, posteriormente, extender la reforestación a toda la región en el oeste del valle.
Fundación Diquecito, desde su creación tiene tres ejes principales: la investigación médica, la divulgación y el contacto con la naturaleza.
Una de sus misiones prioritarias es la preservación y el cuidado de la naturaleza, por lo cual ha invitado a la familia Cabrales, propietaria de la empresa Café Cabrales, quien colabora con la obra de la Fundación Diquecito, ha realizar el acto simbólico de plantar el primer árbol de algarrobo en Diquecito, haciendo de esta acción el comienzo de una labor sostenida para cumplir con el objetivo propuesto de recuperar la naturaleza del lugar.
Al respecto, Antonio Cabrales, presidente de Café Cabrales señala: «nos honra profundamente poner nuestro grano de arena para devolverle a este magnífico rincón del planeta algo de lo mucho que nos brinda: su belleza, su sabiduría, su pureza, y al que recurrimos para estar en contacto con nosotros mismos».
El primer algarrobo nuevo para La Calera fue plantado por su pequeño nieto, Juan Cruz Cabrales, simbolizando la preservación de la naturaleza por y para las generaciones futuras, junto a su padre, Germán Cabrales, y la presidente de la Fundación, la dra Priscila Busse Grawitz.