Para la lectura fueron convocados actores y actrices y directores de cine quienes de a uno y acompañados por melodías de tango que desgranaba el bandoneón de Ligia Algieri.
Abrió la serie Georgina Barbarossa con un texto de Ulrico Schmidt: Viaje al Río de la Plata, y la sucedieron una seguidilla de galanes que arrancaron aplausos y hasta suspiros desde el público. Arturo Bonín leyó un fragmento de La Bolsa, de Julián Martel; Daniel Kuzniecka –cuya aparición levantó aullidos en la platea femenina- recreó a Lucio V. Mansilla a través de Los siete platos de arroz con leche. Lo siguieron Misteriosa Buenos Aires, de Mujica Lainez en boca de Nacho Gadano; el Matadero de Esteban Echeverría leído por Michel Noher y Corazón, de Edmundo D’ Amicis, por Adriana Aizenberg, quien confesó que de chica lloraba leyendo ese libro.
Un momento particularmente emotivo lo crearon Patricio Contreras y Paloma, su hija, quienes juntos leyeron De espaldas a la luna, de Leónidas Barletta. “Ahí tenés un micrófono”, le señaló Paloma al padre demostrando su vínculo.
Aplausos y aullidos coparon otra vez la sala cuando Christian Sancho entró al escenario, varias se acercaron para sacarle fotos pero él no se inmutó a los flashes y mantuvo constante la lectura de Guerra de Malón, de Manuel Prado.
Después pasaron textos de Roberto Arlt, Raúl González Tuñón, Oliverio Girondo, Julio Cortázar, Haroldo Conti, Rodolfo Walsh, Marta Lynch y Pedro Orgambide y otros autores. A los cuales dieron sus voces leyeron Mirta Busnelli e hija, Ana Pauls, Michel Noher, Mausi Martínez, Mónica Galán, Gloria Carrá, Nacho Gadano, Carlos Kaspar, Amelita Baltar, Katja Alemann, Sofía Elliot, Silvia Pérez y Ana Padovani
Pero, estrellas y galanes aparte, el momento cumbre lo protagonizó Marta Bianchi, quien cerró el maratón con un poema que todos esperaban: Fundación mítica de Buenos Aires, de Jorge Luis Borges. Ahí la sala se vino abajo. Digno broche a una de las tradiciones más simpáticas y motivadoras de la Feria.
Los textos fueron seleccionados por Danilo Albero, Vicente Battista y Guillermo Piro y la coordinación está a cargo de María Soledad Lalli y María Rosa Grandinetti.