En efecto, destacó el director del Centro, Víctor A. Beker, el 7,9% declaró que las horas extras le son abonadas como horas normales, un 7,6% que le son compensadas con horas no trabajadas, un 3,7% que se le retribuye parcialmente con dinero y parte con tiempo no trabajado y una inmensa mayoría -58,6%- que no recibe compensación alguna por las horas extraordinarias trabajadas.
Esto contraviene, en principio, lo dispuesto por la Ley de Contrato de Trabajo que, en su artículo 201, establece: “El empleador deberá abonar al trabajador que prestare servicios en horas suplementarias, medie o no autorización del organismo administrativo competente, un recargo del cincuenta por ciento (50%) calculado sobre el salario habitual, si se tratare del días comunes, y del ciento por ciento (100%) en días sábado después de las trece (13) horas, domingo y feriados”.
Con respecto a las actividades donde se concentra la mayor parte de los trabajadores que realizan horas extras no retribuidas, un 22% corresponde a la actividad inmobiliaria, un 17% al comercio y un 16% a la industria manufacturera.
En comparación con los países europeos donde se llevó a cabo un relevamiento similar, se observa que el porcentaje de horas extras no pagadas es significativamente mayor en el caso argentino, aunque cercano al de España, donde alcanza un 52%, según pude verse en el cuadro adjunto, concluyó Beker.