Se entregaron los premios L’Oréal-Unesco “Por las mujeres en la ciencia”

En el Centro Cultural de la Ciencia, se llevó a cabo la ceremonia de entrega de premios L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia”, en colaboración con el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), que destaca la labor de mujeres en la ciencia que están cambiando el mundo.

En su decimoprimera edición, la ganadora del premio nacional fue Paula Casati, por su trabajo en bases moleculares de la inhibición del crecimiento de plantas por radiación UV-B, mientras que la ganadora de la beca fue María Alejandra Molina, por el desarrollo de nanogeles multifuncionales capaces de liberar selectivamente antibióticos a bacterias. Además, recibieron menciones otras cuatro investigadoras Valeria Levi, Andrea Quiberoni, Natalia Servetto y Natalia Andersen.

“La participación de las mujeres es importante para la ciencia misma, por su visión que optimiza el valor del conocimiento y su aplicación para la mejora de la calidad de vida de las personas”, enfatizó Barañao durante la ceremonia, la cual encabezó junto al presidente del CONICET, Dr. Alejandro Ceccatto.

Premio nacional: Paula Casati del Centro de Estudios Fotosintéticos y Bioquímicos de la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la Universidad Nacional de Rosario (CEFOBI, CONICET-UNR) investiga en bases moleculares la inhibición del crecimiento de plantas por radiación UV-B que permite “conocer los efectos negativos en momentos de alta exposición y su impacto en la productividad”, explicó. El proyecto lleva cuatro años de investigación y próximamente será extendido en campo.

Dos menciones: Valeria Levi del Laboratorio de Dinámica Intracelular del Instituto de Química Biológica (IQUIBICEN) del Departamento de Química Biológica de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA trabaja sobre la dinámica de factores de transcripción en células madre y su relevancia en el proceso de la diferenciación celular que servirá “para comprender la complejidad de la regulación de la expresión génica en el complejo entorno nuclear”.

Por su parte, Andrea Quiberoni del Instituto de Lactología Industrial dependiente de la Universidad Nacional del Litoral y del CONICET (INLAIN-UNL-CONICET) desarrolló una tecnología de inmunización natural de bacterias para cultivos más robustos para la industria láctea. “La investigación del uso de esta tecnología servirá para proveer a la industria una herramienta food-grade para el desarrollo natural de starters fagorresistentes”, explicó, algo muy demandado por el sector.

Premio Beca: María Alejandra Molina del Departamento de Química de la Facultad de Ciencias Exactas, Fisico-Químicas y Naturales de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC) trabaja sobre el desarrollo de nanogeles multifuncionales para terapia combinada con acción bactericida y fototérmica que “se plantea como una alternativa para paliar la multiresistencia a los antibióticos desarrollada por las bacterias”, afirmó. “Apuntamos a aplicarlo en tratar superficies y materiales quirúrgicos”, cerró.

Dos menciones: Natalia Servetto del Laboratorio de Ecología Marina de la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Córdoba investiga la acidificación del océano y su impacto sobre el bentos Antártico. La acidificación de los océanos se encuentra entre los efectos del cambio climático, y el océano austral y los sistemas costeros antárticos los más afectados. “El proyecto estudia el efecto de la acidificación sobre especies representativas mediante la utilización de técnicas moleculares que permitirán evaluar su respuesta a nivel fisiológico-específico e impacto global”, detalló.

Por su parte, Natalia Andersen del Laboratorio de Neurobiología de Invertebrados del Instituto de Investigaciones Bioquímicas de Bahía Blanca (INIBIBB-CCT Bahía Blanca) investiga nuevas alternativas para el tratamiento de la enfermedad de Parkinson. “El proyecto estudia la regulación de la progresión de estos trastornos a partir de señales originadas en el sistema nervioso”, además de detectar fármacos y genes que modulen la proteotoxicidad que acompaña a los desórdenes neurodegenerativos.

El Premio L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia” pone de manifiesto la importante contribución de la mujer a la ciencia y consiste en un apoyo económico de trecientos mil pesos para que la investigadora ganadora continúe con el desarrollo de su proyecto dentro del país, y ciento ochenta mil pesos para una joven investigadora o becaria en etapa de formación postdoctoral.