La geografía, pues, se convierte en literaria a la hora de reflexionar sobre los núcleos urbanos a los cuales imprimimos virtudes que nos son propias: soberbias, grandiosas, caóticas, hostiles, violentas, melancólicas.
Los autores aquí convocados convocaron a su vez a un puñado de autores para fundar sus hipótesis y brindarnos una ciudad distinta o idéntica a aquella que alguna vez conocimos o creímos conocer. Todo parecido con la ciudad real, en tal caso, corre por su cuenta.