El ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires instó a los integrantes de grupos de riesgo a vacunarse contra la gripe antes del inicio de los primeros fríos intensos, y recordó que la inmunización demora unos diez días en generar defensas.
“La campaña de vacunación antigripal se extenderá hasta el 31 de julio en la Provincia de Buenos Aires”, explicó el ministro de Salud provincial Alejandro Collia, y agregó que, no obstante, “nosotros recomendamos a los grupos de riesgo que lo hagan cuanto antes, por un lado porque la vacuna tarda entre 7 y 10 días en generar inmunidad y por otro, porque este mes comienza el invierno y se producen descensos bruscos de temperatura que favorecen la circulación de los virus respiratorios”.
Por otra parte, confirmó que la Provincia adherirá a las jornadas intensivas de vacunación antigripal anunciadas hoy por la cartera sanitaria nacional, los días 4 y 5 de junio. En el marco de esa iniciativa se abrirán los vacunatorios hospitalarios y cada municipio dispondrá de puestos de vacunación en lugares públicos.
Desde mediados de marzo el ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires aplica la vacuna antigripal trivalente -que protege contra los virus de la influenza A H1N1, A (H3N2) y B-, en los 1.640 vacunatorios públicos.
Las autoridades informaron que si bien la convocatoria a grupos de riesgo se realizó en forma escalanoda al inicio de la campaña, en este momento y hasta fines de julio podrán concurrir todos los sectores considerados vulnerables como miembros del equipo de salud, embarazadas, puérperas hasta el sexto mes posparto, niños de entre 6 meses y 2 años, personas con enfermedades de base y mayores de 65 años.
Por su parte, el director provincial de Medicina Preventiva, Luis Crovetto, dijo que vacunarse es una “necesidad social”: “Este es el momento ideal para vacunarse porque aún no hay circulación viral y sabemos que a mayor cantidad de población vacunada, menor riesgo de enfermedad y contagios tendremos”.
Asimismo, dijo que además de la inmunización no deben dejarse de lado otras medidas preventivas sumamente efectivas como el lavado de manos frecuente con abundante agua y jabón.