En 1896, los hermanos Fortunato y Ernesto Héctor Tassara instalaron en Junín, provincia de Buenos Aires, un pequeño molino de piedra accionado a vapor al que llamaron San José con una molienda inicial cercana a las 3 toneladas. En tanto que hoy, la molienda diaria es de 300 toneladas, con una capacidad de almacenaje de cereales de 24 mil toneladas, 1200 toneladas de subproductos y 500 para harinas de distintos tipos.
Molinos Tassara es una empresa familiar que comercializa sus productos a lo largo de todo el territorio nacional y que exporta tanto al Mercosur como también a otros continentes; sus negocios están divididos en tres áreas fundamentales: harinas, balanceados y alimento para mascotas.
El negocio principal es la producción y comercialización de harinas tipo 000, 0000 y especiales; semolín, salvado de trigo, premezclas panadera y pasteleras.
La División Balanceados está enfocada a tres segmentos de mercado: producción de leche, engorde intensivo y cabañas.
Desde hace unos años, la empresa también se avocó a la comercialización de alimentos para perros y gatos.
El Licenciado Diego Cifarelli, subgerente general de Molinos Tassara, comenta al respecto de la historia del molino: “La clave de estos 110 años son: transparencia, honestidad y ética” El Ingeniero Juan Carlos Tassara, nieto fundador, agrega: “El principal valor de la compañía es el cumplimiento de la palabra con los compromisos contraídos. A lo largo de todos este tiempo el interés general de la empresa siempre estuvo por encima de los intereses particulares”