El universo del big data lo invade todo. Y el internet de las cosas, que vive su primer gran desarrollo con los coches conectados, hará que dentro de sólo 5 años circulen más de 150 millones de coches inteligentes en el mundo, en un mercado global que alcanzará los 40 mil millones de euros en tres años.
Todos los expertos están de acuerdo: “La telemática representa una disrupción en el mercado”. El análisis masivo de datos por parte de las aseguradoras revoluciona ya el sector con productos a medida del cliente, como “paga según conduces”. Pero el futuro abre posibilidades inéditas para las que el mercado debe prepararse, según los responsables de las principales aseguradoras en España, que se han reunido en una mesa redonda para analizar el futuro de la telemática a petición de Octo Telematics: líder mundial de seguros telemáticos, con 3,4 millones de clientes en el mundo y presencia en España desde hace 10 años, donde ya ha conectado a más de 150.000 coches a través de sus dispositivos telemáticos.
Según los expertos, los principales cambios que la telemática introducirá en nuestras vidas son:
- La telemática permitirá salvar 1.500 vidas al año en la UE, gracias al sistema eCall: Instalar dispositivos con eCall (llamada automática de emergencia) será obligatorio en todos los vehículos nuevos a partir de marzo de 2018, según directiva de la Unión Europea. Esta medida podría salvar alrededor de 1.500 vidas (5% del número de muertos por accidentes de carretera) y reducir las lesiones graves en un 6% anual.
- La telemática es imparable, porque es predictiva: en 15 años, todos los coches serán vehículos conectados, incluyendo los vehículos sin conductor: El ecosistema creado alrededor del vehículo conectado cambia. Ahora se asegura al conductor del coche, pero cuando llegue el automóvil autónomo se asegurará el software. En todo caso, siempre habrá que medir el uso del vehículo y su exposición al riesgo, porque los coches sin conductor también sufren accidentes.
3) La telemática hará que en 10 años cambien los hábitos de conducción, la siniestralidad y la seguridad vial: Los dispositivos telemáticos instalados en los vehículos por compañías como Octo, con fuerte presencia en España y más de 150.000 vehículos conectados, informan a las aseguradoras de cuánto, cuándo y dónde se usa el coche/moto. También controlan cómo se conduce, de forma que eso permite mejorar hábitos y aumentar la seguridad de todos en carretera. - La telemática posibilita que dejen de pagar “justos por pecadores”: la prima se ajusta al uso real del coche o la moto, permitiendo descuentos a los buenos conductores: La telemática permite personalizar en función de la forma de conducir, adaptando la prima al riesgo real de conducción.
Los datos cuantitativos que recogen los dispositivos permiten ofrecer nuevas pólizas, más justas y transparentes. Soluciones a medida basadas en la personalización de la prima (pago por km, cuota fija + variable, prepago por km, conducción ecológica, póliza por tipo de vía más transitada, etc.) Saber cómo se conduce (velocidad media, tipo de giro en curvas, conducción agresiva o tranquila, frenada) permite un ahorro económico directo e indirecto (anulación de costes repercutidos por fraudes ajenos, pólizas verdes) así como el fin de la discriminación por factores basados en perfiles (como el sexo, la edad, los puntos del carnet o el historial del cliente), ajenos a la conducción real. - La tecnología telemática da poder al cliente, que se sitúa así en el centro del negocioNo sólo mejora el precio del seguro para los buenos conductores, aumenta la seguridad (sistema eCall y localización/recuperación del vehículo en caso de robo), disminuye el fraude y el cliente obtiene ventajas de valor añadido, como apps que ayudan a mejorar la conducción y experiencias de gamificación que diviertan al usuario. Cambia el paradigma de la relación cliente/aseguradora, que hasta ahora era poco feliz en términos de interacción (el contacto se produce a raíz de un siniestro o cuando vence el contrato).
En este sentido, los participantes en la mesa redonda apuntan algunas barreras de entrada que todavía tiene que superar la tecnología telemática para desarrollarse masivamente en España:
Se trata todavía de un mercado de nicho, poco desarrollado desde un punto de vista institucional. El principal ´driver´ para el cliente a la hora de instalar un dispositivo telemático en su vehículo es la recompensa que puede tener por ceder parte de sus datos a la aseguradora. Lo importante aún es el precio, que sea barato, más que las ventajas o el valor añadido que la telemática permite conseguir.
El efecto “Gran Hermano”: aún hay incertidumbre, los clientes se preguntan si los datos se van a compartir, cómo se van a usar. Aunque estos temores son infundados, porque con la telemática se prescinde de quién conduce, sólo se atiende a cómo se hace. Además, cada día estamos más habituados a que nuestros datos se usen para proporcionarnos ventajas para nuestro propio beneficio como consumidores. Hay que entender que con esta tecnología ganan todos: se establecen unas reglas del juego más transparentes y se sabe exactamente porqué se paga.
Los responsables de las aseguradoras participantes en el debate propuesto por Octo auguran un futuro prometedor. Se esperan impuestos de circulación variables, un ecosistema más seguro y menos contaminante, una regulación sobre el uso de los cascos históricos de las ciudades basada en datos en tiempo real, un seguro que libere al cliente de pagar cuando no utiliza el coche o moto (vacaciones, días en garaje, etc) y otras muchas novedades que, sin duda, revolucionarán la industria aseguradora del siglo XXI.
En la foto Raúl Alvarez, Chief Program & Transformation Officer de DIRECT SEGUROS; Luis Peña, director del Centre of Excellence of Usage Based Insurance (UBI) de MAPFRE; Alicia Ibáñez, gerente de la Comisión de Seguros de Automóvilesde UNESPA; Fernando Caruncho, director de Aplicaciones/Sistemas de Información de GRUPO MUTUA MADRILEÑA; Miguel Andreu, director de Producto y Contratación y de Desarrollo de Negocio de ADMIRAL SEGUROS; Óscar Pozo, Director del Área Técnica de Autos de REALE SEGUROS; Davide de Sanctis, country manager de Octo en España y Portugal; Javier González Gugel, director de Proposition para Líneas Personales de GRUPO ZURICH ESPAÑA y Jorge Fernández Santín, director del Área de Automóviles de GENERALI.