Ualá es el nombre de la aplicación que ofrece una tarjeta prepaga global Mastercard sin cargo de ningún tipo, transferencias gratuitas, seguras e inmediatas, y análisis de gastos.
«Gratis, sin sucursales ni horarios ni colas ni papeles, con Ualá podes transferir, tarjetear, controlar, ahorrar y financiar directamente desde el teléfono. ¿Cómo funciona? Por primera vez en Argentina, los usuarios se registran 100% desde la aplicación (disponible simultáneamente para Android y iOS) de manera gratuita, fácil y rápida, y solicitan la tarjeta. La tarjeta Ualá Mastercard no tiene cargos de ningún tipo: emisión, renovación, mantenimiento o cierre. Es verdaderamente gratis. En pocos días reciben en su domicilio la tarjeta Ualá que es aceptada en la red más amplia de comercios de Argentina y del mundo, y pueden cargarla en cualquier Pago Fácil o directamente desde su cuenta bancaria», aseguró Pierpaolo Barbieri, fundador de Ualá, historiador económico graduado en Harvard y Cambridge y director ejecutivo de Greenmantle.
«Ualá fue creada por un argentino para los argentinos con la misión de revolucionar la forma en que manejan su dinero. Pierpaolo Barbieri anunció que “con este lanzamiento, buscamos ampliar la inclusión financiera de los argentinos. Somos los primeros en ofrecer un medio de pago aceptado internacionalmente, como es una tarjeta Mastercard, de forma gratuita. Nuestra app, que ofrece notificaciones en tiempo real de los consumos, es la más
innovadora del mercado, y vamos a estar lanzando nuevas funcionalidades que van a transformar la forma de operar, ahorrar y financiarse», finalizó.
Ualá cuenta con el apoyo de importantes inversores internacionales. Se destacan Soros Fund Management, el banco de inversión Jefferies, General Catalyst (inversor de Snapchat, Airbnb y Kayak, entre otros), Bessemer Venture Partners (inversor de LinkedIn, Skype y OLX, entre otros) y Kevin Ryan (fundador de Business Insider, Gilt y MongoDB, entre otros).
La compañía da sus primeros pasos en Argentina – donde la penetración de móviles es del 92% y la tasa de penetración de crédito al consumo sobre PBI es de 6,5%, una de las más bajas de Latinoamérica – y, con el apoyo de sus inversores, apunta a expandirse a otros mercados de la región.