La mágica «Doble mirada» de Gigena Seeber

La exposición está integrada por fotografías de la serie vegetal, fotografía directa, y pinturas acrílicas sobre tela, que muestran una particular y profunda celebración de la Naturaleza.

 

El artista y teórico conceptual Luis Espinosa sugiere una interesante interpretación sobre el sentido de esta muestra y su título: «Las leyes de la óptica explican las modificaciones de la luz hasta proyectarse en el plano sensible. Pero lo que nunca explican es la intervención de una conciencia que incorpora la intencionalidad del sentido al proceso. Un hombre que mira, un hombre que interpreta”. Y continúa: «Carlos Gigena Seeber hace uso creativo de esa doble mirada. Desde una larga trayectoria como fotógrafo, conoce el oficio y las distintas tradiciones más allá de las cuales proyecta su búsqueda regresando a los lugares más sencillos y olvidados del horizonte mundano para redescubrirlos. Bajando la vista hacia el suelo, inclinando la cámara hacia el amontonamiento de hojas, hacia el charco donde se refleja un árbol, un cielo o una arquitectura».

 

Artista multifacético, Gigena Seeber descubrió muy joven la pasión por la fotografía y, luego de un tiempo de «aprendizaje» tomando imágenes de su familia, inició, según sus propias palabras, «la recolección de todo tipo de instantánea. Una manera de crear una historia de los lugares visitados, es ver al mundo a través de mi lente».

 

Su primera exposición estuvo dedicada a «Los Harlistas», como le llamaban a los amantes de esa moto clásica, y a partir de ahí su desarrollo como fotógrafo no se detuvo. Realizó decenas de exposiciones individuales y colectivas en el país, participó de ferias, salones y bienales y también exhibió su obra en España, Estados Unidos, Canadá, China, Irlanda, Escocia, Perú, Paraguay y Brasil.

 

«Las fotos de Carlos Gigena se acercan a lo vegetal con fascinación -escribió sobre el autor Roger Colom-. Una rama caída, con el musgo ya seco, sobre una cama de agujas de pino. La luz dorada que se refleja en las hojas de los árboles en el otoño. Otra rama, con forma de espada japonesa, que flota en el agua marrón de un río junto a un minúsculo islote de verde que desaparecerá con la próxima crecida. Una planta cuyas hojas empiezan a secarse por los bordes».

 

Por su parte, Joan Lluís Montané, de la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA), expreso: «En fotografía, es un creador que desnuda las imágenes, buscando la persistencia de las circunstancias, siendo un observador fiel de la realidad, matizando sus efectos, buscando aquello de incierto, pero a la vez, próximo que ésta siempre en todas sus manifestaciones. Es un apasionado sereno que refleja el momento natural sin ambigüedades, siendo un buscador que necesita conocer y saber, contrastando, para experimentar, pero, después, cuando uno se aleja del impacto inicial constata que su actitud es la de quien está convencido de que lo espiritual es lo cotidiano»

 

La exposición permanecerá hasta el jueves 30 de Junio de 2011

 

Galería El Túnel

Scalabrini Ortiz 573, Villa Crespo (a dos cuadras de Corrientes)

Lunes a sábados de 12 a 21