En el marco del Mes Internacional de la Mujer, Hilda Molina, fue invitada especialmente por la Fundación Deloitte para dar testimonio de su vida y su lucha como mujer, madre y profesional de la ciencia, ante los colaboradores de la firma.
El encuentro fue inaugurado por Carlos A. Haehnel, CEO de Deloitte LATCO, y por Ana Maria Ara y Victoria Zampierin, vicepresidenta y secretaria de la Asociación Civil Crecer en Libertad, entidad dirigida por la la doctora Molina. El cierre estuvo a cargo de Miguel Maxwell, Managing Partner de Argentina, Paraguay y Bolivia, quien destacó del valor destacado de de la médica cubana.
Durante su charla, al destacar el valor de las mujeres, la doctora Molina señaló que “la maternidad es un imperecedero servicio a la vida”. Y en cuanto a sus experiencias personales en Cuba, aseguró que “el amor a mi profesión y mi fe fueron los que me ayudaron a seguir adelante y poder superar las tormentas que me tocaron vivir en mi país”. Y también graficó que su lucha la llevó a “tener el corazón lleno de inviernos”.
Hilda Molina nació en Camagüey, Cuba, el 2 de mayo de 1943. Es Doctora en Medicina graduada en la Universidad de La Habana, especialista de Primero y Segundo Grado en Neurocirugía con Excelentísimo Primer Expediente en el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía de La Habana. Se especializó, además, en restauración neurológica.
En reconocimiento a sus méritos, fue elegida Diputada al Parlamento Cubano en 1993. En 1994, después de un largo proceso de discusión con las autoridades del gobierno cubano, renunció a todo lo que la vinculaba al régimen, incluso a su condición de Diputada.
Confió en la Revolución y, luego de comprobar las injusticias que había dentro del sistema médico cubano, pasó a ser una de las personas más críticas del castrismo, dentro y fuera de la isla. Pidió salir de la misma para viajar a la Argentina a visitar a su hijo y conocer a sus nietos, lo que le fue negado por el gobierno de Castro durante 15 años.
Como resultado de las presiones internacionales y de las gestiones de la Iglesia Católica y de varios gobiernos, incluido el de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en junio de 2009 el gobierno de la isla le otorgó el permiso de salida del país requerido por todos los cubanos.
Así el 14 de junio de 2009, Hilda Molina llegó a Argentina y se reunió con su familia donde la esperaban su hijo, su nuera y sus nietos. Actualmente vive en la Argentina, donde cuida a su madre y disfruta de su familia, al tiempo que realiza sus mayores esfuerzos en favor de la causa por la libertad de su Patria.
La Dra. Molina lanzó el libro sobre su vida titulado “Mi verdad” en el que cuenta, además de su historia dentro de la Isla, su relación con Fidel y cómo pasó de abrazar la que creyó era una verdadera revolución, a enfrentarse a un sistema que califica como “perverso”.
El Día Internacional de la Mujer surgió en el mundo industrializado, al final del siglo XIX, como consecuencia de un período de expansión y turbulencia, crecimiento fulgurante de la población e ideologías radicales.