Félix Salotto presenta su libro sobre la Inteligencia emocional en el deporte

Las personas apelan constantemente a su inteligencia emocional, como el hombre primitivo, están constantemente tomando decisiones en milésimas de segundo y de esas decisiones depende el logro de los resultados que buscan. A diferencia de la inteligencia lógico-matemática (expresada por el coeficiente intelectual) que no experimenta crecimientos significativos a lo largo de la vida, existe la posibilidad de desarrollar la inteligencia emocional, con las experiencias vivenciales de cada individuo”, del libro de Félix Salotto.

“Los deportistas se debaten en una lucha interna acerca de lo que hacen bien y lo que hacen mal, los juicios acerca de las posibilidades o las dificultades que ofrecen los diferentes campos de juego, la capacidad y ecuanimidad de los árbitros, la potencialidad de los adversarios, etc. Este juego mental los mantiene tensos y desenfocados de lo fundamental que es su rendimiento personal y colectivo”, del libro de Félix Salotto.

No sólo poseen inteligencia emocional los jugadores individualmente, sino también los equipos. Éstos últimos, al constituirse como tales, desarrollan capacidades particulares para funcionar y relacionarse, que, si bien tienen que ver con sus integrantes, no necesariamente les pertenecen, ya que son del equipo y lo identifica. Por esta razón el trabajo a realizar, debe ser encarado en lo individual y en lo grupal al mismo tiempo ya que un proceso influirá necesariamente sobre el otro.
¿A que llamamos Inteligencia Emocional? Al proceso de “desaprender” tendencias y formas de observar el mundo que ya no nos resultan efectivas y aprender otras más adecuadas para lo que pretendemos lograr. Es una herramienta que además favorece la disminución del estrés y permite el cambio de “juicios” y valoraciones personales. El entrenador, como líder, también deberá aprender a manejar estas variables.

Este libro es una propuesta para acercar a los deportistas y entrenadores a este aspecto del desarrollo deportivo, a poder detectar aspectos emocionales de manera tal que les permita trabajar sobre ellos antes que se transformen en problemas.