Dra. Laura Maffei, directora de Maffei
Se estima que en el mundo hay más de 347 millones de personas que padecen diabetes. La misma es una alteración compleja, que puede desencadenar en un desequilibrio metabólico por ciertas reacciones del organismo. A continuación, todo lo que tenés que conocer sobre la relación diabetes – estrés, una combinación poco saludable.
Las exigencias de la vida diaria, la rutina y las obligaciones generan en las personas una alerta constante. Esta presión desencadena en un estado de tensión permanente que suele afectar a la gran mayoría y recibe el nombre de estrés. Es necesario entender que, al margen de las manifestaciones físicas y variaciones anímicas, este proceso tiene paralelamente reacciones orgánicas. Por este motivo, es de suma relevancia prestar mayor atención en pacientes con alteraciones metabólicas.
¿Qué es el estrés? El estrés es una reacción normal del cuerpo que prepara al organismo para hacer frente a las situaciones que generan una amenaza. Durante este proceso el cerebro detecta el peligro y estimula a las glándulas suprarenales a producir dos hormonas: adrenalina y cortisol. Es así que el corazón late rápido e irriga mejor a los músculos, la frecuencia respiratoria es mayor, las pupilas se dilatan, la presión arterial aumenta y se libera azúcar que contribuye al aumento de energía. El cuerpo está preparado para tomar la gran decisión: luchar o huir. En ese sentido la perfección del mecanismo de sobrevida que ha preparado la naturaleza es tal, que el cortisol vuelve al cerebro y permite tener una mayor claridad mental para evaluar la situación.
Hoy en día no existen animales feroces contra los cuales luchar, pero el cerebro no lo sabe y descarga las mismas hormonas si detecta una situación de amenaza. De esta manera se comienzan a fabricar hormonas de estrés en situaciones más cotidianas, ya sean un problema de transito o bien, un problema laboral.
Toda situación que genere sensación de Control débil sobre la situación, Imprevisibilidad, Novedad o bien amenaza al Ego (CINE), provoca la descarga de hormonas de estrés (cortisol y adrenalina) como si estuviéramos, al igual que en las etapas primitivas, frente a un mamut u otro animal salvaje evaluando como enfrentarlo.
¿Qué ocurre con los pacientes diabéticos? Es importante que las personas reconozcan los síntomas y signos del estrés en el momento que lo están padeciendo, ya que pocos saben realmente de que se trata. Si bien todas las personas van a manifestar estas reacciones a lo largo de su vida por una cuestión natural y de supervivencia, los pacientes predispuestos a tener perturbaciones metabólicas van a profundizar o desencadenar en mayor medida estos desequilibrios.
Por este motivo, numerosos estudios muestran la importancia del control del estrés particularmente pacientes diabéticos. El cortisol aumenta el azúcar en sangre, que ya de por si es riesgoso, y en conjunto con la adrenalina y el cortisol generan desequilibrios en el organismo que impactan en sus diferentes funciones como ser, la presión arterial. En definitiva, lograr un control de la reacción contribuye al descenso de los niveles de las hormonas de estrés y ayuda a gestionarlo para conseguir una mayor estabilidad.
¿Cómo gestionar el estrés y qué recaudos tomar con pacientes diabéticos? El estrés es una reacción de supervivencia, por lo tanto siempre existirá y es necesario aprender a convivir con él. Para disminuir su impacto es necesario utilizar la capacidad de decidir y saber que depende exclusivamente de las acciones que se tomen con respecto a la conducta.
Está comprobado que las actividades grupales mejoran el nivel de cortisol. Otras alternativas para la gestión del estrés son el análisis de la situación según el acrónimo C.I.N.E y la búsqueda de diferentes alternativas para las ocasiones en que la presión es notable. Es indispensable buscar opciones para lidiar con situaciones de estrés ya que cuando se vuelven crónicas son particularmente perjudiciales para pacientes diabéticos.
Se recomienda buscar distintas actividades que contribuyan a la liberación de energía como por ejemplo caminar, leer, correr, hacer ejercicio, etc. Particularmente los pacientes diabéticos deben llevar un control de sus hábitos y, por sobre todas las cosas, necesitan ser acompañados por un equipo médico que los guíe tanto en su salud física como así también psíquica.