Esta decisión forma parte de una política medioambiental impulsada por la Gerencia Superior de la Compañía, que dio instrucciones en 2007 al Departamento de Política Ambiental Global para que esbozara una nueva estrategia a largo plazo, que tomó forma a través del “Plan de Sustentabilidad Ambiental 2008” en el mes de junio de 2008. En dicho informe, se destacaba el “Proyecto Visión ambiental 2050”, que servía de apoyo para trazar el curso que tomarán las actividades corporativas de Epson hacia el año 2050.
El objetivo principal de este proyecto es minimizar la carga ambiental generada por los productos y servicios de Epson durante el ciclo de vida completo de los productos y, abarcando las emisiones de dióxido de carbono (CO2) durante no sólo la etapa de producción, sino también durante el empaque, el transporte y el uso post venta del producto. Se han incluido también medidas para favorecer el reciclaje, especialmente de los metales poco comunes utilizados en diferentes productos.
Durante los próximos 10 años, la empresa japonesa se enfocará en cuatro iniciativas orientadas al logro de los objetivos propuestos en “Visión Ambiental 2050”. Estas iniciativas incluyen la reducción de las emisiones de dióxido de carbono durante la etapa de fabricación de componentes mediante diseños que ahorren energía, un nuevo modelo comercial basado en la fabricación de productos que duren más, reducción por mitad de la energía utilizada en las “salas blancas” y apoyo para promover la participación de los empleados en programas de reforestación y otros proyectos ecológicos.