Unilever Argentina organizó #MalaMía, charla donde participaron líderes de la compañía de las áreas de Comunicación, Investigación y Desarrollo y Marketing. El encuentro reunió a estudiantes de entre 18 y 27 años de universidades privadas y estatales y profesionales recién recibidos de las carreras de economía, ingeniería, humanas y sociales.
El objetivo del encuentro fue acercar la marca Unilever a estudiantes universitarios a través de anécdotas narradas en primera persona, que demuestran que equivocarse o tener un contratiempo no impide el desarrollo de una carrera exitosa. El aprendizaje y la capitalización de la experiencia constituyeron las principales reflexiones de este innovador y distendido encuentro.
Eugenia Zalis, Vicepresidente de Marketing, Axel Flügel Gerente de Relaciones Externas, y Gabriel Slavsky, Vicepresidente de Investigación y Desarrollo, compartieron sus experiencias. Las anécdotas rondaron sobre cómo conciliar la maternidad con un alto puesto de liderazgo, la importancia de trabajar en equipo y el desarrollo profesional en otro país, superando las barreras del idioma y la adaptación familiar. Las experiencias ayudaron a entender que muchas veces el error puede ser el camino del éxito.
El reconocido publicista Gonzalo Vidal Meyrelles, ex Director de Comunicaciones Integradas de la agencia VegaOlmosPonce, fue invitado para compartir las distintas situaciones e inconvenientes que tuvo que atravesar cuando creó su propia agencia. Esta situación lo llevó a una introspección y a fundar Prójimo, una agencia escuela de publicidad que funciona en la Villa La Cava. Su historia fue inspiradora para los jóvenes presentes, que, generalmente, los errores los perciben como fracasos.
Verónica Carabajal, Gerente de Talento Unilever Cono Sur, explica cómo se desarrolló esta idea: “Invertimos tiempo en profundizar nuestro conocimiento sobre la generación Y y en analizar los cambios que van atravesando. Una de las conclusiones a la que llegamos fue que la generación Y, tiene cierta dificultad en desarrollar resiliencia y enfrentar sus equivocaciones sin desanimarse. En Unilever, al detectar esta situación, quisimos acercarles varios casos en los que personas de alta responsabilidad dentro de la compañía se equivocaron, capitalizaron sus errores y a partir de esa experiencia, crecieron personal y profesionalmente.”