«Como pionero en el desarrollo de soluciones logísticas sustentables, DHL está comprometido con el mismo futuro que la Formula E. Con nuestro programa global de protección al medio ambiente ‘GoGreen’, ya hemos comenzado a integrar la movilidad eléctrica a nuestro negocio. Ahora, estamos orgullosos de embarcarnos en este viaje de descubrimiento e innovación, juntos con la Formula E», afirma Pierluigi Ferrari, director de DHL Automotive.
En este contexto DHL proporciona una amplia gama de servicios de logística incorporando la tecnología verde más eficiente. Alejandro Jasiukiewicz, gerente general de DHL Express Argentina, sostiene que «la Fórmula E ha creado un deporte que empuja los límites de la tecnología y que inspira a integrar prácticas sustentables. Como una compañía pionera en iniciativas de transporte verdes, la asociación de DHL con la Fórmula E es una plataforma perfecta para mostrar nuestras soluciones logísticas amigables con el medio ambiente a nivel mundial».
La logística de la Fórmula E presenta una gran oportunidad para mostrar cómo transportar 40 autos y elementos asociados y, al mismo tiempo, minimizar la huella de carbono de la operación. El objetivo es ser un campeonato verde logrando emisiones neutras de carbono.
El presupuesto anual de la Fórmula E alcanza los 100 millones de dólares anuales, de los cuales más de 11 millones de dólares corresponden a la inversión en logística. Sólo uno de los cuarenta autos de carrera de la categoría tiene un costo de 430.000 euros y pesa 800 kg., mientras que cada betería de litio pesa 320 kg.
Para el equipo de DHL Global Forwarding Motosport, responsable del transporte de la Formula E, la batería de litio representa uno de los mayores retos en la logística de Fórmula E. La batería se clasifica como mercancía peligrosa y requiere especial atención en cuanto a embalaje, manejo y certificación.
DHL es la primera empresa de logística internacional en introducir una meta cuantificable para la eficiencia de CO2 y se ha comprometido, a través de su programa GoGreen, a mejorar la eficiencia de carbono en un 30% para el 2020, con respecto al año 2007.
En 2013, cerca de 2.4 billones de envíos fueron transportados bajo neutralidad climática y el sistema que reporta las emisiones CO2 a los clientes ahora incluye no solamente mediciones de CO2, sino también todos los gases de efecto invernadero y emisiones relevantes en la cadena de suministro.