Culminó el Open Británico en St Andrews

Si hay un torneo con historia es el Masters que se disputa todos los años en Escocia, y más aún cuando se lleva a cabo en The Royal and Ancient Golf Club of St Andrews. Un torneo al que todos quieren acceder, cuyo trofeo (llamado Claret Jug) se distingue por sobre todos los demás, a pesar de su simpleza y antigüedad, y que todo jugador de golf quiere tener en su poder, claro está, para ello hay que ganar el Masters.

Los representantes Argentinos; Angel Cabrera y Estanislao Goya, no pudieron pasar el corte clasificatorio, condiciones adversas del clima, sumado a la dificultad natural de la cancha tipo link hicieron que los representantes nacionales presentaran scores de 149 y 148 respectivamente, que no le sirvió para jugar las rondas del sábado y domingo.

El único latinoamericano que jugó el fin de semana fue el colombiano Camilo Villegas, quien finalizó en el puesto 44, bajando varios puestos debido a una mala ronda final.

Sorprendió a todos la templanza del sudafricano ganador del torneo Louis Oosthuizen, quien un birdie en el hoyo 12 se aseguró un holgado triunfo con -16 para el campeonato, por siete golpes de diferencia con respecto al segundo puesto, y una tranquila caminata hacia el hoyo 18, con 13 fairways y 13 greens en regulación, y un promedio de 319,5 yardas de distancia con su drive, con un swing armónico que lo supo acompañar durante los cuatro días de competencia.

El inglés Lee Westwood, quedó en el segundo puesto gracias a un birdie en el hoyo 18, mientras que el norirlandés Rory Mcilroy ascendió al tercer puesto gracias a una muy buena última ronda con 5 birdies y un bogey, que compartió con el inglés Paul Casey, quien había salido con el ganador en el último grupo pero el triple bogey el el hoyo 12 y bogey en el 15 lo relegaron al tercer puesto, compartido también  con sueco Hernrik Stenson, que tuvo una prolija cuarta ronda con 1 birdie y todos pares.

Oosthuizen, apellido que los comentaristas de ESPN evitaban pronunciar, nombrándolo como el “puntero”, el “sudafricano”, el “jóven”, etc., será el que logra la novena victoria de Sudáfrica en el Abierto Británico, sumándose a la de Ernie Els (2002), Garry Player (1974/1968/1959) y Bobby Locke (1957/1952/1950/1949), empatando con Australia en cantidad de British Open ganados.

En cuanto a países ganadores del Abierto Británico encontramos que Estados Unidos lleva la delantera con 42 triunfos, gracias a jugadores como Walter Hagen, Sam Snead, Ben Hogan, Bobby Jones Lee Trevino, Tom Watson, Jack Nicklaus, y Tiger Woods, entre otros, seguido por Escocia con 41, Inglaterra con 28, Australia y Sudáfrica con 9, España con 3, Irlanda con 2, y con 1 aparecen Francia, Irlanda del Norte, Nueva Zelandia, Zimbaue, y Argentina, con la victoria del Maestro Roberto De Vicenzo en el año 1967.

La edición 2010 del Abierto Británico dejó clara la superioridad de Europa y Estados Unidos, continentes que tuvieron 31 y 24 jugadores respectivamente participando el fin de semana, sobre un total de 75, mientras que luego aparecen Asia y Oceanía con 7 jugadores, Africa con 5 y Latinoamérica con 1 jugador (Camilo Villegas) que pasó el corte clasificatorio.

Del Top Ten o los diez primeros puestos quedaron 6 lugares para Europa, 2 para Estados Unidos y 2 para Sudáfrica, siendo uno de ellos el ganador del torneo.

Entre los continentes que no pasaron el corte encontramos primero a Europa con 29 jugadores, seguido por USA con 23, Asia con 12, Oceanía y Africa con 6, Latinoamérica con 2 (los representantes de Argentina) y por último Norteamérica (Canadá) con 1 jugador.

Es de esperar que cada vez haya más representantes latinos en los torneos, contamos con gran calidad y capacidad de aficionados y profesionales en la región, falta que desde la dirigencia se pongan de acuerdo para lograr que crezca el golf, y se cree un ámbito propicio para el desarrollo del golf, tanto profesional como amateur.

Para destacar fueron las imagines de EPSN HD en alta definición, realmente una excelente cobertura que fue vista por millones de personas en todo el mundo, tal vez un poco larga esta vez para sus comentaristas en español, quienes se quedaban sin temas a medida que pasaban las horas.