Por José Luis Valdellora, Presidente Schneider Electric Argentina
Es difícil creer que en solo seis meses la pandemia de COVID-19 haya provocado una pérdida significativa de vidas, industrias devastadas y el colapso de una economía global relativamente estable y próspera. Han quedado muy expuestas vulnerabilidades críticas y, a medida que el mundo comienza a volver a un cierto nivel de normalidad, las empresas se encuentran en un punto de inflexión. ¿Cómo pueden usar lo aprendido de esta pandemia para determinar el camino a seguir?
Los confinamientos impuestos en todo el mundo durante la pandemia atrasó el Día de Sobregiro de la Tierra al 22 de agosto este año (tres semanas más tarde que en 2019). Sin embargo, según los cálculos realizados por nuestro socio Global Footprint Network, aún estamos excediendo los recursos del planeta. El Día de Sobregiro de la Tierra marca el día en que la humanidad habrá usado todos los recursos ecológicos que el planeta puede renovar durante todo el año, incluida la capacidad de absorber las emisiones de carbono liberadas por la quema de combustibles fósiles. En Argentina debemos colaborar fuertemente a reducir las concentraciones de gases de efecto de invernadero y reemplazar la forma de producir energía: sustituir la energía térmica de carbón por energías renovables cada vez más accesibles y logrando así, reducir las emisiones de Dióxido de Carbono. Además es importante lograr la eficiencia energética logrando que la energía que utilizamos nos rinda al máximo economizando su uso. Otro tema clave es profundizar sobre la Economía Circular y la forma de minimizar los residuos.
Sin ninguna duda, la recuperación debe ser resiliente. Entre las preguntas clave que deben formularse las organizaciones se incluyen: ¿Cómo podemos reinventarnos para mantener nuestra relevancia en un mundo cada vez más marcado por el cambio climático y las limitaciones de los recursos? ¿Cómo podemos crecer de manera sostenible? ¿Cuál es el modelo de negocios adecuado para tener éxito a largo plazo?
Para que estas conversaciones se conviertan en acciones, Schneider Electric y Global Footprint Network aunaron esfuerzos para lanzar un libro electrónico: «Estrategias para la Prosperidad de un planeta», un marco diseñado para definir estrategias para lograr el éxito duradero sin exceder las limitaciones de los recursos del planeta.
Ahora mismo, sabemos que el mundo puede cambiar de enfoque rápidamente para responder a una crisis. Podemos aprovechar la misma urgencia que nos ayudó a salir de la pandemia y aplicarla a otros desafíos como el cambio climático. A continuación, se incluyen algunas posibilidades:
Las empresas deben evaluar sus deficiencias y abordarlas para protegerse contra futuras disrupciones. Esto va mucho más allá de la seguridad de las operaciones y la protección de los establecimientos; se trata de un cambio sustancial de estrategia que prevea la vulnerabilidad y la imprevisibilidad.
Ignorar estas vulnerabilidades podría salirnos caro.
Algunos ejemplos:
- Para la primera semana de abril de 2020, más de la mitad de la población mundial (3900 millones de personas) se encontraba bajo algún tipo de confinamiento.
- En los Estados Unidos, el precio de un barril de petróleo fue negativo por primera vez en la historia.
- Los mercados de aviación se vieron afectados por una disminución del 70% de pasajeros a nivel mundial. Se espera que el transporte aéreo de pasajeros pierda aproximadamente USD $ 314 000 millones este año.
- Descarbonización en profundidad
La «pausa» generada por la pandemia ha permitido a las empresas buscar y adoptar de manera radical soluciones para superar las crisis globales, centrándose especialmente en la emergencia climática. Existen muchas iniciativas que ya se encuentran en curso con este propósito:
- 155 empresas (con una capitalización de mercado combinada superior a USD 2,4 billones, que representa a más de 5 millones de empleados) firmaron una declaración de la Iniciativa de objetivos basados en la ciencia que insta a los gobiernos a sumarse a sus esfuerzos de recuperación y ayuda económica de la pandemia de COVID-19 con los últimos avances científicos en materia climática.
- Crecimiento con innovación y digitalización
La innovación, la digitalización y tener un propósito han demostrado ser más imprescindibles que nunca en momentos de incertidumbre. Las empresas comprometidas con sus empleados, clientes y comunidades que han buscado soluciones creativas en medio de la crisis y han convertido el desafío en una oportunidad superan a sus pares.
Algunos ejemplos extraordinarios:
- 65 por ciento de los empleados británicos trabajaron en forma remota durante el confinamiento. Casi la mitad (47 por ciento) nunca había trabajado en forma remota antes de la crisis de COVID-19, y 77 por ciento siente que se ha manejado bien con el trabajo remoto.
- Se prevé que entre 25 y 30 por ciento de la fuerza laboral global trabajará desde su casa varios días por semana para fines de 2021. Además, muchas otras prácticas comerciales como los viajes de negocios no volverán a los niveles previos al COVID-19.
- Cómo eliminar las brechas
Todavía existen brechas en nuestro ingenio y han quedado al descubierto. No todas las personas o empresas cuentan con las herramientas digitales necesarias para tener éxito. Nuestra economía sigue dependiendo fundamentalmente del modelo «tomar, hacer y desechar» para el crecimiento.