Desde el comienzo de la pandemia Cáritas Argentina ha entregado alimentos y kits sanitarios a más de 2.200.000 personas, para lo cual debió incrementar la asistencia alimentaria que brinda a comunidades necesitadas de todo el país.
Cáritas además de ayuda material, da contención humana y acompañamiento espiritual, lo cual resulta necesario en un contexto como el actual, donde la prolongación del aislamiento y el distanciamiento social está teniendo un profundo impacto psicológico y económico en nuestra sociedad.
“Luego de más de 4 meses de cuarentena la pandemia puso de manifiesto una gigantesca desigualdad social agravada por condiciones de hacinamiento en barrios vulnerables, la falta de servicios básicos como el agua o el gas”, señaló Juan Pablo Gasme, Coordinador de Desarrollo Institucional de Cáritas Argentina. “En paralelo también se agudizó dramáticamente la vida de familias y personas que viven en situación de calle y quedaron abandonados a su suerte, sin peatones ni comercios que los ayuden”, dijo.
En ese sentido, Gasme añadió: “La compleja realidad económica de nuestro país comenzó a escalar a sectores que nunca antes habían requerido asistencia. Hoy estamos ante una nueva realidad, que implica el empobrecimiento de familias trabajadoras (comerciantes, profesionales, pymes) que, por primera vez en la vida, deben salir a pedir ayuda.”
El principal desafío de Cáritas es llevar asistencia, esperanza y oportunidades, brindando ayuda material y acompañamiento espiritual. Por eso, desde el comienzo de la emergencia, la organización caritativa de la Iglesia trabaja en torno a tres ejes estratégicos, con el fin de proteger y contener a los sectores más expuestos de nuestra sociedad:
- Eje alimentario: fortalecer los servicios alimentarios y la asistencia de calle, reforzando la ayuda brindada a través de comedores, merenderos y puestos móviles en la calle. Paralelamente multiplicaron la entrega de bolsones, viandas y kits de higiene.
- Eje sanitario: Apoyar a los sistemas de salud, creando y fortaleciendo dispositivos no hospitalarios de aislamiento para los más vulnerables.
- Eje ingresos familiares. Facilitar el acceso a las ayudas del Estado, y procurar la reactivación local de las actividades laborales.
Simultáneamente, se diseñaron e implementaron distintas campañas con fines diversos: recaudar fondos, adquirir artículos de primera necesidad y productos de prevención sanitaria, armar bolsones y viandas para las familias, etc.; y se formularon convocatorias a voluntarios de todo el país.
El Papa Francisco decía que, en esta emergencia, “nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente”.
Con este espíritu, Cáritas continúa redoblando esfuerzos y hace un llamado a la esperanza y a la generosidad de todos los argentinos para que sigan colaborando con los que más sufren.