Loli Van Harden presenta su colección otoño-invierno 2017 en la que «el juego, la creatividad y las originales combinaciones de colores, texturas y apliques están a la orden del día».
Para esta temporada se sigue la tendencia de los 80’ y los 90’ dándole el toque final a cada look: un taco ancho, un brillo combinado con madera, ojalillos, croco, piedras, stras, y otros detalles elegidos con mucha dedicación y que hacen al todo.
«Generar propuestas para cada momento del día, es la intención de Loli Van Harden. Por eso, la línea incluye: ballerinas, botas texanas cortas, botas de caña alta, borcegos, mocasines y stilettos, en una amplia variedad de estilos, elegante, casual, desestructurado, sobrio y folk», explicaron.
Las texturas son las protagonistas, principalmente el charol, pero también el croco y los metalizados, que siguen vigentes y también se usan para el día.
En la gama cromática predominan los colores intensos e innovadores como el bordeaux, el uva, el verde y el azul, además de los infaltables negro, suela, dorado y peltre.
«Fiel al estilo de la marca, los calzados de Loli Van Harden se lucen por su originalidad en las mezclas y el juego de colores y texturas como cueros grabados, laminados, croco, gamuza, pelo y los apliques como hebillas, cadenas, tachas, herrajes, flecos y recortes con formas de estrellas, que marcan tendencia», señalaron desde la compañía.