Estos datos ayudan a incluir adecuadamente al jamón cocido dentro de un plan de alimentación.
De acuerdo a los estudios, el jamón cocido es una carne magra de baja densidad calórica, aproximadamente de 1 caloría por gramo, valores similares a los que se presentan en la pechuga de pollo sin piel o la carne vacuna magra y muy por debajo de los valores que se presentan en la carne vacuna medianamente grasa, siendo habitual que el consumo de jamón cocido sea en porciones menores a las de dichos cortes.
Además contiene pocas grasas saturadas, cerca del 1,2%, frente al 3,0% que se presenta en la carne vacuna magra. El jamón cocido presenta cantidades significativas de ácidos grasos omega 3, componentes esenciales que no pueden sintetizarse en el organismo y deben obtenerse a través de la alimentación.
“El jamón cocido responde a todas las exigencias de los consumidores, que requieren diariamente alimentos más saludables y frescos, sin excesos de calorías y fáciles y accesibles para su consumo”, expresó Marcelo Díaz, Gerente de Marketing de Paladini.
Frente a un mundo agitado, cargado de compromisos, el jamón cocido se convierte en un aliado para todos aquellos que deseen mantener una dieta saludable ya que es fácil de comprar, preparar, transportar y comer, ideal para aquellos que almuerzan fuera de sus hogares.
Su proceso de elaboración requiere el agregado de sal, aproximadamente 850 mg de sodio por cada 100 gramos de jamón cocido, por lo que esto debe ser considerado para el cálculo del sodio total del plan alimentario.
Como todo alimento esencialmente proteico, el jamón cocido produce mayor saciedad y ante un creciente hábito de incorporar porciones reducidas, facilita el cumplimiento de dietas de bajo valor calórico.
El presente trabajo se enmarca en una serie de informes que la SAN y Paladini elaborarán a futuro para aportar a la sociedad los conocimientos básicos en materia de nutrición.
La SAN fue fundada en 1941 y se convirtió en la entidad pionera en temas de nutrición tanto en Argentina como en el resto de Latinoamérica. Su principal objetivo es el de mantener, promover y difundir el conocimiento científico de temas relacionados con la nutrición. De esta manera, la SAN impulsa distintas actividades de educación e investigación para los profesionales y para la comunidad en general.