El Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, el Rector de la Universidad de Tres de Febrero (UNTREF), Aníbal Jozami, y el Secretario de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban “Gringo” Castro, encabezaron el acto de firma del convenio para la convocatoria de Proyectos de Actualización Tecnológica de la Economía Popular.
La convocatoria tiene como base una partida de 100 millones de pesos con un tope de 8 millones de pesos por proyecto. En el convenio firmado, el MINCyT se compromete a transferir el 100% de los fondos a la UNTREF, quien será la encargada de gestionar, organizar y administrar la totalidad de los fondos de los proyectos que resulten aprobados para su financiamiento.
Durante el encuentro, Filmus manifestó la importancia de que la ciencia “no solo se mueva por la curiosidad de las y los investigadores sino que, fundamentalmente, esté enfocada en resolver los problemas de la gente. Y en esta tarea las universidades y las organizaciones de la economía popular tienen un rol central. Quiero mencionar el Programa ‘Ciencia contra el hambre’ que desarrolló a lo largo y ancho del país una gran cantidad de nodos y de redes entre las universidades, institutos del CONICET y organizaciones de la economía popular que han hecho un gran aporte para la resolución de problemas de suma urgencia”.
El Ministro de Ciencia señaló que la economía popular “ocupa un lugar muy importante entre los 10 ejes estratégicos del Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación 2030. Durante los años ’90 y durante el gobierno anterior se redujo el presupuesto de ciencia y se consideraba que debíamos apostar por un modelo exportador de materias primas. Los documentos de los ’90 de los países centrales decían que había países enteros que no eran viables y, en esa línea, acá se llegó a decir que había provincias y sectores de la población que no eran viables. Frente a la exclusión social que generaron esos modelos las organizaciones populares fueron las que permitieron implementar un sistema de sobrevivencia de los sectores marginados de la población argentina. Desde el Gobierno Nacional impulsamos un modelo de desarrollo soberano de la ciencia y la tecnología que esté apuntado a resolver y mejorar la realidad de nuestra gente, este debe ser el sentido de lo que hacemos desde la gestión del Estado y desde la investigación científica”.
Filmus destacó la celeridad de todas las partes involucradas “que en menos de un mes permitieron que podamos lanzar la convocatoria” y remarcó que en el Estado “debemos dejar de funcionar con programas encorsetados y hacerlos a medida de cada sector. Porque si no las convocatorias y concursos los van a ganar, no quienes tienen más mérito, si no quienes tienen un mejor punto de partida. Si cambiamos la lógica de esa competencia vamos a avanzar verdaderamente hacia la federalización de la ciencia para disminuir las desigualdades sociales y territoriales”.
Por último, Filmus expresó que los fondos de la convocatoria “son una base. Si tenemos más proyectos que valgan la pena financiar vamos a encontrar los recursos para hacerlo. Y aquellos proyectos que no estén en condiciones de ser financiados nos obligan a generar los mecanismos, a través de las universidades y los institutos del CONICET, para que puedan ser asesorados y mejorar su presentación”.
A su turno, Jozami manifestó que la UNTREF “se ha caracterizado siempre por su participación en distintos ámbitos de la sociedad sin descuidar sus roles específicos de creación de conocimiento y formación. Así encaramos hace ya tiempo la colaboración con la red de trabajadores de la economía popular y hoy iniciamos con la cooperación del Ministerio una nueva etapa haciendo posible la concreción de muchísimos proyectos que serán fuente de trabajo y realización para quienes fueron excluidos del sistema productivo”.
Por su parte, Castro celebró la convocatoria y dio detalles de la realidad en los barrios populares. A su vez, el Secretario de la UTEP subrayó la importancia de “poder articular entre el Estado, las universidades y las organizaciones de la economía popular para desarrollar estrategias para que la tecnología apueste al desarrollo de la economía popular. Tenemos el desafío de generar un mayor nivel de encuentro para poner en valor el trabajo que se realiza en el campo de la economía popular y que sea sostenible en el tiempo”.
Estuvieron presentes el Secretario de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación, Diego Hurtado; la Subsecretaria de Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación, María Cecilia Sleiman; el Subsecretario de Estudios y Prospectiva, Eduardo Mallo; la Coordinadora General del Programa RAICES, Carolina Mera; la Diputada Nacional, Mara Brawer; y el Síndico General de la Nación, Carlos Montero.
La convocatoria de Proyectos de Actualización Tecnológica de la Economía Popular tiene como objetivos reconocer, promover y desarrollar iniciativas de actualización tecnológica de Unidades Productivas de la Economía Popular (UPEP) y fortalecer el vínculo permanente entre el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación y las necesidades de las y los trabajadores del sector, potenciando las distintas iniciativas que se desarrollan en el territorio.
El monto del financiamiento de la convocatoria es de 100 millones de pesos con un monto máximo de 8 millones de pesos por proyecto que tendrán una duración de hasta 6 meses con la posibilidad de solicitar una prórroga de 3 meses. El MINCyT cofinanciará hasta el 80% del costo total del proyecto debiendo la Universidad y/o las otras instituciones aportar el 20% restante.
Los aspectos comprendidos en la actualización tecnológica son el técnico-productivo; la organización interna del grupo productivo; la comercialización, y el ecosistema productivo y cadena de valor.
Entre las temáticas y aspectos comprendidos en la actualización tecnológica de las UPEP se encuentran:
– Recuperación, reciclado y servicios ambientales: Subrama Recicladores.
– Servicios Socio-Comunitarios: Subrama Cuidadores.
– Industria Manufacturera: Subramas Indumentaria y Textil y Producción de Alimentos.
– Agricultura Familiar y Campesina.
Los rubros financiables serán:
– Equipamiento e insumos relacionados con los objetivos del proyecto.
– Pasajes y viáticos destinados a las actividades de integrantes de los Equipos de Trabajo y Desarrollo que se involucren en trabajo de campo en los territorios.
– Contratación de servicios técnicos especializados.
– Gastos en certificaciones, análisis, marcas y patentes.