Por Leandro Swietarski –Fundador y Ceo Tecnokids
Hace tiempo que las plataformas y redes sociales permiten realizar transmisiones en vivo. Sin embargo, nunca fue una de las características más utilizadas por los usuarios. La mayoría prefiere filmarse, revisar lo grabado y luego subirlo sin correr riesgos de participar en situaciones ridículas o hacer comentarios que pudieran malinterpretarse.
Pero de repente llegó una pandemia que obligó a todo el mundo a quedarse en sus casas y lo grabado quedó viejo.
La novedad es el vivo. Un poco porque la gente necesita entretenimiento nuevo, que se pueda adaptar a la realidad del encierro, y otro poco porque los artistas y usuarios, en sus hogares y con tiempo de sobra, están comenzando a generar contenido como nunca antes.
El menú es amplio. Hay clases de gimnasia con un profesor que te reta si bajás el ritmo, hay transmisiones de ceremonias religiosas donde podés conversar con el oficiante, hay conciertos de grandes artistas internacionales, hay clases de filosofía, de cocina, hay lectura de cuentos para chicos, y la oferta sigue.
Todo en vivo. Pudiendo interactuar, hacer comentarios y hasta elegir una canción.
Fito Paez dio el puntapié inicial el viernes a la noche con récord de espectadores. Su recital en YouTube tiene más 85.000 reproducciones. Para tomar dimensión del número, la capacidad del Luna Park es de 9.290 personas.
En todo el mundo está sucediendo algo parecido. Chris Martin, cantante de Colplay, conversaba con sus seguidores y cantaba las canciones que le pedían.
Miley Cyrus, Demi Lovato, Justin Bieber son otros de los artistas que también comenzaron a hacer “vivos” en sus redes sociales con el hashtag #TogetherAtHome. La idea principal es generar conciencia en la sociedad para tener una conducta responsable, pero los mismos artistas confiesan en sus conversaciones que están aburridos y extrañan cantar.
El sitio NPR armó un calendario de los próximos conciertos que se realizarán online.
Por el momento, la gran mayoría de las propuestas son gratis. Pero en Asia primero y en Europa después, los que lograron posicionarse como referentes en cada rubro, están empezando a cobrar por sus servicios o a aceptar que marcas auspicien algún segmento.
El gran escritor Hernán Casciari, ofreció el sábado a la noche un recital de cuentos por streaming para el cual había que comprar entradas, pero las mismas incluían un cupón para poder pedir, gratis, comida a través de un servicio de Delivery. La promo estuvo disponible para toda América Latina al mismo tiempo.
Inmediatamente al finalizar su presentación, el video pasa a tener disponibilidad plena y gratuita, para cualquier persona del planeta.
La gran pregunta es si ésta pequeña revolución tecnológica es una moda o llegó para quedarse. La respuesta, como siempre, la van a dar los usuarios, que cada vez tienen más opciones dónde dedicar su tiempo. Pero hay otra variable, inmanejable e impredecible, que depende de cuánto tiempo va a durará esta cuarentena.