La espondilitis anquilosante forma parte de un grupo de enfermedades reumáticas autoinmunes denominadas espondiloartritis axial. Se trata de enfermedades que son desestimadas por confundirlas con dolores producto de las malas posiciones, esfuerzos o movimientos bruscos lo que lleva, entre otras cosas, al diagnóstico tardío.
La espondiloartritis axial es una enfermedad que afecta tanto a hombres como a mujeres en todo el mundo, y se caracteriza por provocar dolor recurrente en la espalda baja (lumbalgia). En tal sentido, cuando el dolor persiste más de 3 meses en personas menores de 45 años, es preciso acudir al médico reumatólogo para realizar una consulta. Si los pacientes no son diagnosticados a tiempo y no reciben el tratamiento indicado por el especialista, el avance de la enfermedad puede afectar la vida del paciente, llegando incluso a causar discapacidad.
El Dr. Marcos Rosemffet, médico de planta del “Instituto de Rehabilitación Psicofísica” (IREP), asegura que “en general, en los pacientes con Espondiloartritis, el retraso en el diagnóstico se debe a que en primer lugar consultan a otros especialistas como traumatólogos, neurocirujanos, gastroenterólogos y dermatólogos. Por ello, es importante fomentar el conocimiento de esta entidad en la población general y en la comunidad médica, para generar una rápida derivación a un reumatólogo, quien está capacitado y entrenado para manejar esta patología. Por otro lado, se cree erróneamente que las enfermedades reumáticas sólo afectan a gente de edad avanzada, este grupo de enfermedades se puede ver en gente joven, por lo que siempre se debe estar alerta, para abordar al paciente de manera precoz”.
Para llegar al diagnóstico de manera temprana, es primordial identificar el malestar y acudir al especialista. Por eso, el Dr. Hernán Maldonado Ficco, médico reumatólogo, Jefe sección reumatología del Hospital San Antonio de Padua, Río Cuarto, Córdoba, recomienda estar atentos a la hora de identificar qué tipo de dolor tenemos para diferenciar si es producto de una mala postura, o si puede ser espondiloartritis axial.
“El síntoma más frecuente es el dolor lumbar. Éste se caracteriza por aparecer de noche, incluso suele despertar al paciente con la necesidad, en algunos casos, de levantarse y caminar para que este dolor ceda. Se acompaña de rigidez de columna por la mañana al levantarse y mejora cuando el paciente comienza a movilizarse. Algunos pacientes suelen tener inflamación de las articulaciones, más comúnmente de miembros inferiores como rodillas, caderas y tobillos”, explica el especialista. En relación con el rango etario que podría verse afectado, el Dr. Mandonado Ficco aclara que “si bien la espondiloatritis axial puede afectar a los niños, en general los síntomas pueden iniciarse desde los veinte años”. En promedio, el paciente tarda más de dos años en acudir al médico reumatólogo y diagnosticar la enfermedad.