Durante el acto, Boudou destacó que “hemos repatriado a la científica 1.000 y esto es todo un símbolo de los tiempos que vivimos. Así como tomaron la decisión personal de irse, también lo hicieron para volver y esto tiene que ver con el proyecto de país que estamos llevando adelante”. Además resaltó que “los sistemas vinculados con el capital humano, como el científico, no pueden prenderse y apagarse. Nuestros investigadores serán los garantes de que estas políticas sigan adelante”. Finalmente, al referirse a la entrega de la Distinción Investigador/a de la Nación, Boudou aseguró que “nuestros científicos y científicas están viendo reconocido por todo el pueblo argentino al fruto de su esfuerzo”.
La científica repatriada Verónica Perera regresó al país en febrero de este año, tras 14 años de residencia en Nueva York, para incorporarse al equipo de investigadores y docentes de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV). Perera retornó a la Argentina en el marco del Programa RAICES (Red de Argentinos Investigadores y Científicos en el Exterior), que depende la Dirección Nacional de Relaciones Internacionales del Ministerio de Ciencia, y tiene como objetivo promover la repatriación y la vinculación de científicos argentinos que residen fuera del país.
En el caso de la Dra. en Bioquímica Ana Belén Elgoyhen, se le hizo entrega de la distinción que reconoce la labor de los profesionales más sobresalientes del sistema científico nacional y el recorrido académico de un científico, por el valor que representa su trabajo para el desarrollo argentino. El Investigador de la Nación se elige entre quienes reciben el Premio Houssay Trayectoria. La distinción es organizada por la cartera de Ciencia, a través del Programa Nacional de Popularización de la Ciencia y la Innovación.
En el marco de este evento se entregaron también los “Premios Houssay”, “Premios Houssay Trayectoria” y el “Premio Jorge Sábato” de 2012, en reconocimiento a la labor de los investigadores que desarrollaron la mayor parte de su labor científica en el país y que contribuyeron a la producción de nuevos conocimientos con impacto social y productivo y con fomento a la formación de recursos humanos. Los galardones otorgados fueron nueve. En el caso de los “Premios Houssay” los recibieron: Santiago Grigera (área física, matemática, ciencias de la computación); Omar Azzaroni (área química, bioquímica, biología molecular); Mariana Maccioni (área ciencias médicas); y Mario Pecheny (área ciencias sociales). Los “Premios Houssay Trayectoria” fueron para: Ricardo Guillermo Durán (área física, matemática, ciencias de la computación); Hugo José Fernando Maccioni (área química, bioquímica, biología molecular); Ana Belén Elgoyhen (área ciencias médicas); y Elizabeth Jelin (área ciencias sociales). Finalmente, se entregó el “Premio Jorge Sábato” a la investigadora Raquel Lía Chan (área química, bioquímica, biología molecular).
Asimismo el vicepresidente entregó al presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Roberto Salvarezza, una placa conmemorativa por los 55 años del organismo. El CONICET cuenta actualmente con 7.500 investigadores, 2.300 técnicos, 1.100 administrativos y financia el postgrado y postdoctorado de 9.100 estudiantes que realizan sus tesis doctorales en las universidades del país. Se compone de 192 institutos y centros de investigación, 13 Centros Científicos y Tecnológicos, y dos centros multidisciplinarios. Recientemente se crearon seis Centros de Investigaciones y Transferencia. Por su parte, CONICET se encuentra entre las 100 primeras instituciones en cuanto a la producción y calidad de trabajos científicos, de un total de 3.300 en el mundo. Y en este sentido, está posicionada segunda en Latinoamérica y primera en Argentina.