Moreno concibió Open English junto con dos amigos como una manera de ayudar a los estudiantes de idioma inglés a desechar los libros de texto y librarse de la necesidad de asistir a clases reglamentarias, y en su lugar, tomar cursos flexible en Internet que incluyen algunas lecciones privadas en línea con profesores hablantes natos de inglés. Open English se fundó en 2006 y se lanzó comercialmente en 2008 en Venezuela, donde Moreno nació. Tuvo rápido éxito y ahora el programa se ofrece en 15 países de habla hispana. Moreno tiene planes de ofrecer Open English en más países de habla hispana así como en otros países no hispanoparlantes.
En una entrevista Moreno dijo que «uno de los desafíos más grandes para los empresarios que empiezan en América Latina es el limitado acceso a capital institucional. La mayor parte de los empresarios con los que hablo en la región funcionan durante menos de 120 días antes de quedarse sin efectivo. Sus fondos precarios provienen de amigos, familiares o pequeños ahorros personales».
A diferencia de Estados Unidos dijo, América Latina carece de «redes de ángeles» – es decir grupos de individuos ricos que buscan invertir en pequeñas nuevas empresas. Eso significa que los nuevos negocios tienen que competir por capital institucional, y para hacerlo, deben demostrar rápidamente su potencial para el éxito en el mercado.
«Para competir con empresarios de Estados Unidos», agregó, «es esencial que sus contrapartes latinoamericanas simplifiquen sus ideas y enfoquen su tiempo y recursos limitados en crear prototipos de su visión que funcionen. ¡La meta es construir un producto viable mínimo en menos de 120 días!».
Moreno, quien a menudo aparece en anuncios de televisión de Open English , comenzó su carrera al fundar una compañía que proporcionaba instrucción privada del idioma inglés a ejecutivos latinoamericanos de compañías catalogadas en el índice Fortune 500. Pero decidió aplicar lo que aprendió acerca de ingeniería de productos en la Universidad Simón Bolívar para lanzar su propia compañía que utiliza tecnología y técnicas innovadoras que prometen a los usuarios que en 12 meses pueden dominar un inglés que les sirva. Según indica, él y el equipo de Open English han logrado recaudar hasta ahora más de 10 millones de dólares en capital de riesgo y han aumentado la fuerza laboral de la compañía a más de 500 personas.
