El curso duró 12 encuentros de dos horas cada uno y fue dictado íntegramente por empleados de 3M, quienes se hicieron un tiempo para preparar las clases y trasmitir a los chicos las posibilidades que pueden encontrar, con esfuerzo y dedicación, una vez finalizado el colegio.
Las primeras 11 clases tuvieron lugar en las oficinas de 3M y la última se llevó a cabo en el colegio de los chicos, en donde se hizo la entrega de diplomas.
“Invertir Vale la Pena” busca estimular al alumno y contribuir al desarrollo de habilidades y competencias de liderazgo, emprendimiento y finanzas personales. Los voluntarios reciben capacitación y elementos para dar las clases, pero también son invitados a enriquecer los encuentros con presentaciones y juegos.
Tras el éxito alcanzado en las clases y en la cantidad de chicos que quisieron participar de la propuesta, 3M se ha lanzado a participar de la segunda parte de «Invertir Vale la Pena» alentando nuevamente a sus empleados a participar de esta iniciativa.