“Las irritaciones de la piel de la cola del bebé tienen una relación cronológica con la incorporación de alimentos semisólidos. Cuando el bebé comienza con las primeras papillas, el PH[1] de sus deposiciones sufre modificaciones, al igual que la consistencia de las mismas, pudiendo producir en algunas pieles sensibles (no siempre) mayor irritación que se verá reflejada en la zona del pañal. La dermatitis en la cola del bebé puede acentuarse si no se lo protege con pomadas que generen un efecto barrera.”, cometo el Dr. Diego Pochat, asesor de Hipoglós VL.
Generalmente, la dermatitis en el área del pañal y el aumento de las paspaduras en relación con la incorporación de papillas y otros alimentos, es transitorio hasta que se logra la adaptación. Esta es una de las afecciones dermatológicas más comunes que sufren los bebés entre los 3 y los 12 meses de vida, siendo el pico entre los 6 y 9 meses.
“Si la dermatitis perdura en el tiempo, hay que indagar que relación existe con los aspectos que siguen:
- Por un lado la búsqueda de qué alimento/s es el que produce la irritación,
- y, por otro, considerar esa piel del bebé como probablemente atópica (más sensible). De esa manera, se deberían aumentar todas las medidas referentes a ésa situación, pues también hay que indagar la posibilidad que ante determinados alimentos (tomate, huevo, queso rallado, pescado, etc.) haya dermatitis en otras zonas de la piel, como las peribucales, mejillas, extremidades etc.», agregó el Dr. Pochat.
María Flores Lazadín, Licenciada en Nutrición, sugiere que la incorporación de alimentos o líquidos debe realizarse a partir del sexto mes de vida del bebé, complementándolo con la lactancia hasta los dos años de edad, en lo posible. (Fuente: OMS, Organización Mundial de la Salud, 2001).
Se recomienda empezar con una sola comida al día rica en proteínas, vitaminas y minerales, e ir incorporando las otras comidas de a poco, a medida que el pediatra lo indique. Al inicio se pueden preparar comidas semisólidas, es decir, papillas tipo puré que puede estar elaborada a base de verduras (Zapallo, Zanahoria, Papa y Batata) o de frutas (Manzana, Banana y Pera). Es importante que la papilla sea preparada con aceite vegetal para incrementar el aporte energético, como también con queso untable para que sea más nutritiva. Luego se debería continuar con el agregado de carnes para optimizar el aporte de hierro en las papillas.
Recomendaciones para tener en cuenta al comenzar con la alimentación del bebé:
- Es normal que en el inicio de la alimentación el niño coma sólo una ó dos cucharaditas o que rechace algunos alimentos. En caso que persista el rechazo a comer se debería consultar al pediatra.
- Es útil brindarle al bebé el alimento de diferentes formas y en distintas preparaciones, por ejemplo en el caso de las frutas, ofréceselas solas, con yogurt, como puré, como licuado. También es divertido, presentarle los alimentos formando diferentes figuras ó animalitos en el plato, esto llama la atención de los más chiquitos.
- Es importante tener en cuenta que el número de comidas que el niño tiene que realizar por día dependerá de la edad que tenga y de la recomendación de su pediatra.
- Con el inicio de la alimentación complementaria, y sin abandonar la lactancia materna, hay que ofrecerle agua potable, previamente hervida durante 5 minutos.
- Es un hábito de los adultos agregar sal o azúcar a las preparaciones, el bebé no necesita que le aumenten el sabor salado o dulce a sus comidas. Se deberían a incorporar a la alimentación del bebé cuando el pediatra lo indique.