Durante el encuentro se aprobó un documento que será incluido en la declaración final y en el Plan de Acción de la VI Cumbre de Jefes de Estado, a la que concurrirá la presidenta Cristina Fernández de Kirchner la próxima semana.
Los representantes de ambas regiones resolvieron los principios estratégicos de la “Iniciativa Conjunta de Investigación e Innovación ALC-UE”. Esta iniciativa incluye la aprobación de temáticas que fueron identificadas como prioritarias por ambas regiones: energía; medio ambiente y cambio climático; agro-alimentos; salud; tecnologías de la información y la comunicación; y actividades horizontales en políticas de ciencia y tecnología con énfasis en la construcción de capacidades humanas e institucionales. Además, se acordó fomentar la lucha contra la pobreza y la promoción de la inclusión social como actividades transversales a todas las prioridades temáticas.
Asimismo el documento resalta la importancia de la promoción y la inversión en las infraestructuras de investigación basadas en las TICs. En ese aspecto la Iniciativa conjunta destaca que una mejora en la interconexión de las redes académicas y el fortalecimiento de los vínculos transatlánticos a través del tendido de cables de fibra óptica, posibilitará una mayor cooperación en investigación y desarrollo (I+D) entre ambas regiones. Otro punto importante que contempla el documento es la creación de un Fondo Conjunto de Cooperación (FCC) que permitirá poner en marcha acciones dentro de las prioridades temáticas citadas anteriormente.
El ministro Lino Barañao explicó que uno de los puntos fuertes del debate giró en torno a la posibilidad de “acordar qué instrumentos pueden asegurar un mayor impacto social de la ciencia y la innovación para involucrar la participación de la sociedad en las políticas científicas y tecnológicas”. Y agregó que “esta Iniciativa Conjunta de Investigación e Innovación significa plasmar el compromiso que existe entre los países de América Latina, el Caribe y la Unión Europea en el fomento de la cooperación científica y la colaboración tecnológica como herramientas imprescindibles para el desarrollo social y económico”.
Los países de América Latina, el Caribe y la Unión Europea han avanzado en los últimos años en el desarrollo de acciones conjuntas dirigidas a garantizar un mejor uso de las capacidades existentes en la ciencia, la tecnología y la innovación, no sólo como base para la competitividad sino como complemento del desarrollo económico, de nuevas fuentes de trabajo y como garantía del crecimiento a largo plazo. En particular la Argentina ha mantenido una fuerte participación en los proyectos del 6° y 7° Programa Marco de la Unión Europea, y en los últimos dos años ha logrado el primer puesto en Sudamérica en efectividad (cantidad de proyectos aprobados sobre los presentados).